TRADICIONES BOGOTANAS.
LA NAVIDAD.
En este instante quiero hablar acerca de las tradiciones Bogotanas, nos encontramos en una época donde la navidad y las tradiciones decembrinas nos invaden a todas aquellas personas que somos habitantes de la hermosa ciudad de Bogotá.
la época de diciembre es considerada por muchos como un momento para reunirse en familia, compartir, es un instante del tiempo donde los Bogotanos pueden ver el fruto de su trabajo, todo un año arduo de mucho esfuerzo se ve reflejado en una época donde los abusos no faltan, donde todos respiran un ambiente de regocijo, bienestar, es detener el tiempo por unos días o un mes quizá, mientras se disfrutan las fiestas que han de venir como lo son el 7 de diciembre de velitas, es aquel día donde todos esperan que llegue la noche para que en cada lugar y vivienda, en cada parque, en las aceras de la ciudad, los creyentes católicos encienden velas, porque consideran que la Virgen Maria, los visitara y llenara sus hogares de Bendiciones, sin embargo, es la mismo tiempo donde las personas Bogotanas no toman conciencia del impacto medio ambiental y estético de la Ciudad. al día siguiente puedo observar como una ciudad se llena de cera de diferentes colores, es algo desagradable, desde mi punto de vista, las personas les encanta esa noche, pero no logran percibir el impacto que puede generar en la estética de Bogota, yo solo espero que en momentos donde construyen cosas y las destruyen al tiempo, limpien, creen esa cultura del orden, del bien estar.
Siguiendo la redacción y el ciclo de cada año, se pueden observar a las personas mas tranquilas, los medios de transporte se convierten en lugares donde ya se respira navidad y diciembre, cada persona en su lugar de trabajo y en sus viviendas adornan y decoran la ciudad, todos se encuentran a la expectativa de los juegos pirotécnicos, de la música vieja de diciembre, de las costumbres de cada uno de los que vivimos en esta hermosa Ciudad, los medios de comunicación nos invaden en cada uno de nuestros hogares, se despierta en las personas el deseo de las comidas, los buñuelos, la natillas, las galletas de diferentes sabores, para unos el licor se vuelve un medio de disfrute, el aguardiente no puede faltar, las comidas de noche no se hacen esperar, todos anhelan el pavo, la lechona y todas aquellas comidas que deleitan el paladar de los Bogotanos, ademas, no puede faltar una que otra pólvora, a pesar de su prohibición, los mas ingeniosos y arriesgados logran encontrar esos explosivos como sea, la idea es disfrutar, es no cohibirse de los placeres, sin importar que pueda ser un riesgo para la salud del que los manipula.
El comercio se activa, se puede ver como los centros de distribución de alimentos y las grandes superficies se llenan de consumidores, aquellas personas que ansiosas por aprovisionar sus hogares, no les importa esperar, hacer fila, ver tantas personas en la misma situación, todo con tal de que ese 24 y 25 y 31 de diciembre sean como lo esperan cada uno de su núcleo familiar. La gran central del comercio como San Victorino se convierte en una explosión comercial, las personas compran los regalos de navidad, otras esperan en los madrugones para comprar ropa de cálidad y a muy bajos precios, las calles son abarrotadas de gente, pequeños artesanos colocan sus puestos de comercio en las calles y los parques, la informalidad es parte ya normal de nuestra condición económica moderna. Los centros comerciales se convierten en la zona preferida por personas de estratos medios y altos, pero a la final, nadie se queda atrás, todos abastecen de diferentes maneras sus hogares para recibir el diciembre que todos habían esperado durante el año trascurrido.
Ese 24 de diciembre, todas las familias se reúnen, es un momento donde todos comparten, bueno, no todos, algunas personas como los habitantes de calle, ven como los demás planean y corren con tal de disfrutar esta época, ellos a diferencia, viven sucumbidos en un mundo del cual les es difícil salir, tal vez por negligencia, problemas emocionales, perdida de seres queridos, las adicciones como la droga y los estimulantes, o simplemente la carecía de amor desde tempranas edades de sus vidas. Sin embargo, sus navidades son con los suyos, con personas en sus mismas situaciones de vulnerabilidad, así se podría contar la historia año tras año.
La noche del 24 es única, la pólvora no se hace esperar, todo encienden las luces, esperan que sean las 12 de la noche, se puede salir a las calles y contemplar el tumulto, la cantidad de personas disfrutando esta época, tal vez unos tomando licor, otros con sus amigos, otros con sus familiares, niños jugando en las calles, o simplemente personas solas y conservadoras que prefieren estar en sus casas y esperar la navidad. Se me ha olvidado nombrar aquellas personas que viajan y disfrutan su navidad con sus seres queridos en otros lugares y rincones de la geografía Nacional. La noche brilla, la plaza de Bolivar esta repleta de gente, contemplando los juegos y espectáculos que ofrece la Alcaldía Mayor de la Ciudad de Bogotá.
En fin, es una época hermosa donde todos debemos disfrutar al máximo con nuestros seres queridos, con los que mas amamos, un momento donde se puede disfrutar en comunidad, donde podemos despegarnos por un momento de la tecnología y amar a los que tenemos alrededor. Vale la pena.
Saludos.
Por. Daniel Esteban Benavides Chacón
